Concepto
El acúfeno o tinnitus se puede describir como un sonido constante que no originamos de manera consciente por nosotros ni por el entorno y que no podemos silenciar ni apagar.
La palabra acúfeno proviene del griego y significa sonido que aparece. Tinnitus proviene del latín y significa tintineo o campanilleo. Tinnitus se usa en las lenguas anglosajonas mientras que acúfenos fue adoptado por la lengua española. Ambos términos significan lo mismo.
Puede ser percibido por uno o por ambos oídos. El sonido puede parecerse a un zumbido, chirrido, silbido, pitido, motores, grillos o cualquier otro tipo de ruido.
Es un síntoma y no una enfermedad. Por si misma no representa diagnóstico alguno ya que puede provenir de múltiples patologías y necesitar un tratamiento diferente. Este es uno de los mayores problemas de los acúfenos. Al originarse por múltiples causas o patologías no hay una misma solución para todos.
Se han hecho adelantos al pasar de considerar al acúfeno como una alteración de origen puramente coclear a un trastorno en el que participan tanto las vías auditivas como distintas áreas del sistema nervioso central vinculadas con la audición, pero pese a ello no se ha conseguido dar una solución al problema. Es muy frecuente en las consultas de muchos especialistas y en la de los médicos generales (un 7% de la población ha consultado alguna vez a su médico de atención primaria por este motivo) siendo un verdadero problema no resuelto en el mundo médico y científico.
El acúfeno no se puede medir cuantitativamente, pero lo que sí se puede es evaluar su repercusión en la vida del paciente. A mayor nivel de ansiedad producida por el acufeno, mayor intensidad de ruido. La inaudibilidad del acúfeno por las otras personas provoca frustración en el paciente ya que nadie le entiende o incluso puede no ser tomado en serio. Si en el inicio, el paciente trata de identificar el origen del acufeno en su entorno habitual, al cabo de varios días terminaría por admitir que ese ruido nace en el interior de su cabeza o en sus oídos. En esta fase es cuando los individuos suelen consultar al médico. Por parte del médico, jamás debería contestarle diciéndole que el acufeno no tiene solución, ya que esto puede provocarle más estress y desesperación
Según la American Tinnitus Association (ATA) el acúfeno grave representa, tras el dolor intenso y los trastornos del equilibrio, el tercer síntoma más incapacitante que puede sufrir el humano. El acufeno es un motivo frecuente de consulta en atención primaria. Un 7% de la población ha consultado alguna vez a su médico de cabecera por este motivo
Puede aparecer como un síntoma secundario a casi todos los procesos del oído. Suele ser bilateral, y si es unilateral predomina en el lado izquierdo. La hipoacusia, tras la artrosis y la hipertensión es el tercer problema más frecuente en la tercera edad. Siendo la prevalencia de hipoacusia tan alta, y teniendo una clara relación entre la pérdida auditiva y la génesis del acufeno, parece importante prestarle atención
Historia
Sobre los acúfenos se lleva escribiendo desde hace muchos siglos:
Fue en la civilización egipcia, concretamente en la decimoséptima dinastía egipcia (1650-1532 a.C) donde se encontró el primer texto que hablase de los acufenos, llamado el Libro Médico de Crodilópolis. El tratamiento usado por aquellos años era verter hierbas, aceite, incienso, resina de árboles y tierra en el oído de la víctima, usando un embudo de madera.
La civilización greco-romana (VIII a.C – V d.C) asociaba los acúfenos a estados depresivos y a trastornos cerebrales al igual que hacían con otras enfermedades como la epilepsia, al que denominaban directamente “el mal sagrado” (Alejandro Magno y Julio César sin ir más lejos). Los romanos, que ya sabían lo incómodo que podía llegar a ser escuchar constantemente un silbido, un zumbido, o lo que fuese, solían elegir para sus reuniones lugares cercanos a manantiales o fuentes para que así el sonido del agua suavizase esa sensación. Hay una frase de Hipócrates, médico griego, allá por el año 400 a.C que dice: ¿Por qué razón cesa el ruido si uno produce un sonido más fuerte? ¿Será porque el eco más fuerte apaga al más débil?
Los hindús mediante el Ayurveda, -nombre de la medicina tradicional de la India que tiene como objetivo común la unificación de cuerpo, mente y espíritu- entienden los acufenos como un síntoma de trastorno del prana vayu, parte del vata que reside en la cabeza y gobierna todas las funciones cerebrales superiores.
En el Talmud babilónico de los judíos, en los primeros siglos de nuestra era, los acúfenos son calificados como la “maldición de Tito”, el destructor del templo de Jerusalén, y están envueltos en una aureola de misticismo y divinidad.
Jean Marie Gaspard Itard(1775-1838) usaba un motor de relojería para enmascarar el acúfeno y si era un acúfeno intratable recomendaba ir a vivir a un molino de agua.
Muchos personajes históricos sufrían tinnitus. Miguel Ángel, escuchó ruidos en su cabeza. Beethoven, padeció acúfenos atribuidos a la otosclerosis que condicionaron su extraño carácter, le llevaron a la psiconeurosis y a punto estuvo de suicidarse. Uno de los primeros científicos en registrar datos sobre el tinnitus fue Charles Darwin, quien escribió un diario que registraba la frecuencia y la gravedad de su tinnitus.
La primera terapia de tinnitus, fue la de un médico francés que en 1821 recomendó la distracción de un fuego crepitante de leña para disminuir la sensación de tinnitus. En el año 1861, 20 años después, Prosper Ménière, médico también francés describió los síntomas de la enfermedad de Menière que son vértigo, pérdida de audición y tinnitus. Con ello consiguió que los pacientes afectados por esta enfermedad dejaran de ser tratados como enfermos mentales.
En el siglo XX se hizo evidente que la incidencia de tinnitus en la población general había aumentado dramáticamente y que había que hacer algo. A mediados de siglo los médicos comenzaron a especializarse en el tinnitus y fue entonces cuando comenzaron a desarrollarse las terapias modernas. Estos especialistas, empezaron a estudiar el tinnitus científicamente y luego comenzaron a desarrollar sus terapias especializadas.
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