Imagina que estas en un día soleado y ves un charco de agua en la carretera. Sin lentes polarizadas, la luz reflejada por el agua puede ser muy intensa y molesta, lo que dificulta la visión. Pero con las lentes polarizadas, la luz reflejada se bloquea, lo que hace que el charco de agua sea mucho menos molesto para los ojos. Podemos observar también este reflejo cuando estamos conduciendo y dejamos un papel u objeto en el salpicadero, reflejándose en el parabrisas.
Además de la reducción del deslumbramiento, las lentes polarizadas también mejoran la claridad y el contraste, lo que significa que pueden ayudar a distinguir objetos en condiciones de luz brillante. Son una excelente opción para deportes al aire libre como la pesca, el esquí o el senderismo, ya que reducen el deslumbramiento y mejoran la visión en condiciones de luz brillante.
Como ópticos-optometristas que somos, hoy queremos explicarte qué son las lentes polarizadas y como están diseñadas:
Las lentes polarizadas están diseñadas para bloquear la luz reflejada, que suele ser luz que se mueve en todas las direcciones. Esto se logra mediante un filtro polarizado que solo permite el paso de la luz que se mueve en una dirección específica. Este filtro se compone de una capa de moléculas alineadas en una dirección específica, conocida como la dirección de polarización.
Cuando la luz llega a la lente polarizada, las moléculas del filtro solo permiten que pase la luz que se mueve en la misma dirección de polarización. Esto significa que la luz reflejada, que se mueve en todas las direcciones, se bloquea y solo la luz que se mueve en una dirección específica llega al ojo.
En pocas palabras, las lentes polarizadas son lentes de sol que tienen un filtro especial que bloquea la luz reflejada y el deslumbramiento. Este filtro solo permite que pase la luz que se mueve en una dirección específica, lo que significa que reducen el deslumbramiento mejorando la claridad y el contraste.
¿Todavía no las has probado?